Review * BloodHunter * - "The End of Faith" -
Aún queda mucho tiempo para que llegue “El Fin de la Fé” en el death metal patrio. Bloodhunter así nos lo demuestran con este lanzamiento.
El LP abre con el corte, “The Forbidden Zone”, el cual, aunque brevemente, resulta ser una gran muestra del sonido que encontraremos en el trabajo completo, unas escalas que se precipitan con extrema violencia del hacha de Fenris con una innegable reminiscencia al maestro del metal James Murphy, ídolo entre ídolos. A esta sangrienta labor se unen las implacables líneas de bajo de Éadrom y la cadencia propia de un martillo hidráulico de los parches de Marcelo Aires, el cual en ocasiones suena como la inimitable máquina incansable de picar carne de Gene Hoglan.
Tras el primer corte, se abre paso el tema homónimo del álbum “The End of Faith”. Aquí empezamos a comprobar realmente la crudeza de la agrupación gallega, los riffs, totalmente vieja escuela comienzan a inundar nuestro cerebro, y antes de darnos cuenta estaremos gritando por dentro End of Faith!!!. Es un tema realmente pegadizo y bien estructurado, claras muestras son el clásico esquema pregunta/respuesta tan esgrimido en el viejo death, el cual precede a un verdadero solazo. La voz de Diva Satánica es un regalo para los oídos de cualquier amante del death metal. Consigue traer de vuelta los laureados tiempos del “Individual Thought Patterns” de los impíos Death, también consigue generar atmósferas vistas en álbumes como el legendario “Necroticism” de los increíbles Carcass. La joven consigue proyectar verdadera maldad a través del micrófono, reflejando una oscura sombra que te perseguirá hasta en sueños.
“Eyes wide open” se presenta como un corte de poca duración pero termina siendo toda una apisonadora. Mención especial al trabajo de la locomotora rítmica conformada por la oscura trinidad instrumental, los cambios de ritmo comandados por el genial Marcelo nos zarandean con violencia y brutalidad hasta que las cuerdas de Fenris y Éadrom nos dejan sin saliva y a merced de los atronadores guturales de Diva Satánica. “Still standing up”, “Death and Rebirth” y “The Queen Beast” son tres temas que aglutinan a la perfección la esencia de la formación. En “Still standing up” la banda deja clara su obsesión con los armónicos, tema con un regusto thrasher total, la voz de Diva Satánica exhibe su gran estado de forma. El riff del minuto 1:10, ejecutado con un palm-muting que inspira verdaderos instintos suicidas desemboca en un corto, pero majestuoso solo. “Death and Rebirth” comienza con un apacible arpegio de una cristalina limpieza, el cual sigue sonando tras la entrada en escena de la distorsión y el resto de “artefactos de guerra” ejecutados con gran sobriedad por la banda,cuidando siempre, de manera meticulosa, la estructura rítmica es precisa, acercándose en ocasiones a los momentos más deliciosamente oscuros de la escuela sueca de death metal. El cambio de tempo del minuto 2:08 es uno de esos detalles que elevan los trabajos musicales a niveles por encima de la media. Este tipo de pasajes le dan dinamismo y polivalencia al trabajo, el cual, sirviéndose de estos recursos, hará “más asequible” la entrada al género de bastantes tímpanos aún enternecidos.
La atmósfera conseguida en “The Queen Beast” es uno de los momentos álgidos del álbum. El tema es un machetazo directo a la caja torácica. Desde el segundo 0 hasta el final del corte, se destila rabia, violencia y “manía persecutoria”. Resulta verdaderamente satisfactorio ver temas como este; exentos de carencias, cercanos a la perfección. Los constantes blastbeats salidos de ese “portal de dolor” que es la batería de Marcelo, no te dejan ni un segundo para tomar aliento. La voz de Diva Satánica se reivindica como protagonista en este corte; qué facilidad para evocar maldad la de esta joven, excepcional trabajo de la vocalista de la banda. Del resto del trabajo, desde Radio Rockefort, queríamos destacar dos temas que nos han gustado especialmente: “All these Souls Shall Serve Forever” y “Possessed by myself”. El primero es absolutamente brillante, abriendo con un riff que perfectamente podría haber sonado en alguno de los primeros trabajos de los griegos Suicidal Angels y ojo, que, ser comparado con el material más añejo de los griegos, es un halago enorme teniendo en cuenta la trayectoria de los atenienses.
Como broche y colofón, tenemos una increíble versión de Death, “Crystal Mountain”. Una versión que, personalmente, como amante absoluto de la banda americana, me cautivó por completo. Y es que el tema, tiene personalidad propia pero al mismo tiempo recuerda con mucha precisión a la original, logrando hacer un trabajo muy positivo cuando el objetivo es “honrar” la memoria de un grupo de tal calibre, virtuosismo y magia. No se me ocurre una forma mejor de terminar un álbum como este, el cual parece estructurado para contraponer “el aire fresco” que supone el trabajo de Bloodhunter y al mismo tiempo, un flashback a las principales referencias e influencias del grupo. Sin duda alguna, álbum totalmente recomendado, coronándose como uno de los mejores lanzamientos del género reciente en nuestras fronteras -y con clara proyección internacional-.
Texto : Javi "Rockefort" Mozos
Edición : Woody Rockefort